Nerd-torial: El dilema del dithering – Por qué nuestro oído a veces vence a la teoría
¡Bienvenidos de nuevo, queridos nerds del audio! En el último Nerd-torial os presentamos nuestro proceso de grabación de vinilos de alta precisión, desde la grabación de enteros de 32 bits con el RME ADI-2 Pro FS hasta el procesamiento interno de flotantes de 64 bits en Sound Forge Pro 15. Aprendimos por qué esta precisión informática extrema es crucial para conservar el «aura» de nuestros discos sin pérdidas.
Pero al final de todo proceso de masterización hay una decisión delicada: reducir la profundidad de bits para la exportación. Y aquí es donde entra en juego el dithering, una técnica que parece contradictoria a primera vista, pero que es esencial para la calidad del sonido. Y como descubrimos en Radio Madre Tierra, a veces incluso funciona de forma diferente a lo que predice la teoría.
Dithering: El pequeño ruido que hace grandes diferencias
Recuerda: nuestros datos de audio se procesan internamente con un increíble punto flotante de 64 bits. Se trata de un rango dinámico que está mucho más allá de lo que puede captar el oído humano o incluso la mejor tecnología de estudio. Si ahora reducimos estos datos a 24 bits (el estándar de Hi-Res FLAC) para exportarlos, se producen errores matemáticos de cuantificación. Estos errores no son diferencias de redondeo inofensivas, sino que se manifiestan como distorsiones ásperas y poco musicales que pueden sonar como «chirridos» o «desgarros» digitales, sobre todo en pasajes silenciosos.
El difuminado es la solución: añadimos un ruido diminuto y aleatorio a la señal. Este ruido es tan pequeño que apenas se oye. Pero tiene un efecto mágico: aleatoriza los errores de cuantificación y los convierte en un ruido de sonido analógico mucho más agradable. El resultado: un sonido más claro, detallado y natural, aunque reduzcamos la profundidad de bits.
El duelo del dithering: POWR 1 (estándar) vs. POWR 3 (modelado del ruido)
Hay distintos métodos de dithering. En Radio Madre Tierra, podíamos elegir entre POWR 1 (dithering estándar sin modelado de ruido pronunciado) y POWR 3 (con modelado de ruido).
La teoría convencional suele afirmar que la conformación del ruido (como en el POWR 3) es ventajosa. ¿Por qué? Desplaza la energía del ruido interpuesto desde los rangos de frecuencia en los que nuestra audición es más sensible (los medios) a las frecuencias más altas y menos sensibles. El nivel general de ruido tiende a ser aún mayor, pero se concentra donde menos deberíamos percibirlo. Para la música clásica en particular, con sus pasajes extremadamente silenciosos, éste se ha anunciado a menudo como el método superior para mantener libres de ruido los detalles más finos del rango medio.
El choque práctico: John Mayer y la guitarra acústica
Naturalmente, queríamos poner a prueba esta teoría nosotros mismos. Nuestras pruebas iniciales con piezas densas y complejas (como el Trío de John Mayer) apenas mostraron diferencias audibles entre los métodos de dithering. La música estaba tan «llena» que enmascaraba eficazmente el ruido del difuminado.


Pero entonces llegó la prueba de fuego: una grabación acústica en solitario de John Mayer: sólo su voz y una guitarra. Aquí, con este material transparente e íntimo, de repente se hizo evidente una clara diferencia, ¡a favor del dithering estándar (POWR 1)!
Lo que oímos fue una «nitidez» indeseable en los registros altos de la guitarra y con voces concisas cuando se aplicó el modelado de ruido (POWR 3). El original sonaba mucho más parecido al archivo WAV maestro con POWR 1. La teoría de que el ruido puede «ocultarse» en las frecuencias altas llegó aquí a sus límites.
Por qué a veces nuestro oído vence a la teoría: El factor Hi-Res
Esta observación plantea cuestiones importantes y confirma nuestro escepticismo ante las afirmaciones generalizadas en el mundo del audio:
- La audición humana es más compleja: la suposición de que «no se oye nada» por encima de 20 kHz o de que «puedes hacer lo que quieras con ella» es demasiado simplista. Aunque no percibamos las frecuencias por encima de 20 kHz como tono, pueden influir sutilmente en el timbre, la sensación de espacio, la precisión de los transitorios y la «naturalidad» general de la imagen sonora. Una concentración de ruido en estas regiones puede manifestarse como una dureza o agudeza desagradable en el espectro percibido.
- Conformación del ruido y audio de alta resolución: Muchos algoritmos de conformación del ruido se desarrollaron y optimizaron en una época en la que lo normal eran 44,1 kHz y 48 kHz. En nuestras altísimas frecuencias de muestreo de 192 kHz (y superiores en el procesamiento), donde existe una gama de frecuencias mucho más amplia más allá de 20 kHz, los efectos del ruido desplazado pueden tener un impacto diferente, y posiblemente negativo. Parece que los algoritmos de estas regiones producen a veces artefactos que nuestra «persona completa» sí percibe.
Conclusión de la vacilada de Radio Madre Tierra
Basándonos en nuestras exhaustivas pruebas de escucha e investigaciones en profundidad, en la Radio Madre Tierra hemos optado por el dithering estándar (sin modelado agresivo del ruido). Puede que teóricamente no ofrezca «esa última pizca de inmunidad al ruido de rango medio», pero proporciona un sonido más consistente, natural y, sobre todo, discreto para toda la gama de nuestro material de vinilo, desde densas grabaciones de rock hasta delicada música acústica.
Esto demuestra una vez más que, aunque la teoría nos da una valiosa pauta, al final es el oído entrenado del ingeniero de sonido el que toma la decisión final. En Radio Madre Tierra, confiamos en nuestros oídos para hacerte llegar el «aura de la música» de la forma más auténtica posible.
Florian Reiterer is an audio engineer and musician with a passion for high-resolution audio. He founded Mother Earth Radio to explore and deliver the best possible listening experience.
…see full Bio